
¿Cómo se calculan las utilidades en Ecuador?
28 de Enero 2025
Educación Financiera
Tiempo de lectura: 4 min
Cobrar las utilidades es uno de los momentos del año más esperados por los trabajadores en Ecuador. Más que un simple beneficio anual, representan una forma de compartir el éxito económico de las empresas con quienes contribuyen a su crecimiento. Este tema no solo genera expectativas, sino también muchas preguntas sobre cómo funcionan y cómo saber el monto a cobrar. Sigue leyendo porque vamos a explicarte todo lo que necesitas saber sobre las utilidades.
¿Qué son las utilidades de una empresa?
En Ecuador, las utilidades de una empresa representan las ganancias que quedan después de cubrir todos los costos y gastos operativos. Según la legislación ecuatoriana, las empresas privadas están obligadas a distribuir un porcentaje de estas utilidades entre sus trabajadores como parte de su derecho laboral y así reconocer el aporte de los empleados a su éxito y fomentar la equidad económica.
Las utilidades son un indicador clave de la salud financiera de cualquier empresa y reflejan su impacto positivo en el entorno laboral y social.
¿A qué trabajadores les corresponde utilidades?
El derecho a recibir utilidades está garantizado por la ley para todos los trabajadores que se encuentren bajo una relación laboral formal, afiliados al IESS. De igual forma, los extrabajadores que hayan prestado sus servicios durante el año fiscal también tienen derecho a recibir las utilidades correspondientes.
También es importante destacar que los trabajadores a tiempo parcial o aquellos con contratos temporales tienen derecho a recibir una proporción de las utilidades, de acuerdo con el tiempo trabajado. De esta manera, la ley busca asegurar que los empleados reciban una parte de las ganancias generadas por la empresa, contribuyendo a su bienestar económico.
¿Cómo calcular las utilidades?
Calcular las utilidades en Ecuador requiere tomar en cuenta diversos aspectos. Primero se calcula el 15% de las utilidades netas, que es el monto destinado para repartir entre los trabajadores. Este 15% se divide en dos partes: el 10% se distribuye equitativamente entre todos los empleados, mientras que el 5% restante se asigna proporcionalmente a los trabajadores con cargas familiares.
La distribución de las utilidades se basa en el tiempo trabajado, por lo que aquellos con más tiempo recibirán una mayor participación. Aunque el cálculo de las utilidades es anual, los plazos y formas de pago pueden variar, según el acuerdo entre la empresa y sus empleados.
¿Qué son las cargas familiares?
Las cargas familiares se refieren a las personas que dependen económicamente de ti y que tienen derecho a recibir una parte de las utilidades de la empresa. Estas cargas incluyen:
Pareja o cónyuge: que cuenten con un registro legal de su relación.
Hijos: menores de 18 años o de cualquier edad que presenten alguna discapacidad.
¿De qué mes a qué mes se calculan las utilidades?
Las utilidades se calculan dentro del período fiscal anual, que abarca desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre. Este cálculo tiene lugar una vez que la empresa determine sus ganancias netas, al cierre del ejercicio.
Fórmula para calcular las utilidades
Aquí tienes un ejemplo práctico de cómo calcular tus utilidades:
Una empresa de 10 empleados generó $100,000 de utilidades netas en el año fiscal.
¿Cuándo se pagan las utilidades en Ecuador?
En Ecuador, las utilidades se deben pagar a los trabajadores hasta el 15 de abril de cada año. El plazo para el pago es de 15 días posteriores al 31 de marzo, fecha límite en la que las empresas deben calcular las utilidades correspondientes al ejercicio fiscal del año anterior.
¿Qué pasa si una empresa no paga las utilidades?
Además de enfrentar consecuencias legales, si una empresa no paga las utilidades correspondientes, puede ser sujeta a sanciones y demandas por parte de sus empleados. La multa oscila entre tres y 20 salarios básicos unificados. Si, además, omite declarar el pago de utilidades, la multa puede llegar a ser de entre 10 y 20 salarios básicos.
Estas sanciones no solo afectan las finanzas de la empresa, sino que también dañan su reputación, provocan conflictos con los trabajadores y ponen en riesgo su estabilidad. Cumplir con esta obligación legal es esencial para evitar problemas económicos y legales a largo plazo.